Siempre me han gustado las cosas antiguas, esas que esconden una historia detrás, y me gusta imaginar de quién eran, donde vivía esa persona, como las utilizaba … Por eso los rastros me chiflan porque, además de encontrar auténticos tesoros a precio de ganga, tienes la sensación de haber entrado en el túnel del tiempo.
Y eso es lo que sentí el sábado pasado en el rastro de Jalón (un pueblo del interior de la Marina Alta), la sensación de haber vuelto a mi infancia y estar en casa de mis abuelos, no sabéis la cantidad de objetos familiares que vi.
El rastro lo hacen todos los sábados del año y, si os gustan las antigüedades os recomiendo ir porque os encantará. Solo por pasear y dar un vistazo merece la pena y, además, en este caso, nosotras nos hicimos con unas tijeras de costura antiguas de los años 50 preciosas ¡¡¡que nos costaron sólo 5€!!!
Esta ma la hubiera llevado a casa … 🙂
Si os animáis a ir, os recomiendo que luego comáis en Les Terrasses de la Torre en Gata de Gorgos, un restaurante de los de toda la vida (yo iba ya con mis padres cuando era pequeña), en plena naturaleza, y de los que yo llamo de las 3 B, bueno, bonito, barato.
Y vosotras, ¿qué planes habéis hecho este puente?
Sandra que pinton!! Me lo apunto para la proxima ruta alicantina. Besazo, Ro
¡Me alegro de que te guste Rocío! un beso grande