Madurar es entender que no todo tiene que ser perfecto para ser feliz

Desde pequeñas nos han enseñado que tenemos que cuidar de los demás, a veces incluso antes que de nosotras mismas.

Hace unos años yo estaba en un bucle infinito, sin nada de tiempo para mi, compaginando mi trabajo por cuenta ajena con los niños y la casa, estresada y cansada de ir todo el día corriendo de aquí para allá y, si conseguía sacar algo de tiempo para mí, me sentía culpable... cosa que creo que nos pasa a muchas ;)

Sin embargo, desde hace unos años he cambiado por completo esa forma de pensar. El hecho de estar sola con tres niños y dos trabajos completamente diferentes, me ha hecho darme …

Ir al post

¡No te pierdas nada! Suscríbete a la newsletter

Para que te enteres de todo antes que nadie, para que no te pierdas cosas que te gustaría encontrar, para llevarte sorpresas, ideas y sonrisas… para ti