Erase una vez un proyecto bonito, algo que no sólo teníamos entre manos, también en el corazón. Con el que quisimos salir de nuestra casa para llegar a la vuestra.
Le dimos vueltas y vueltas, como si fuera una madeja. ¡Espera, es que en realidad era una madeja!
Cogimos a nuestras familias y salimos con nuestra mejor sonrisa, lana y mucho cariño. No sabíamos donde llegaríamos, de lo que no teníamos dudas es de que fuera donde fuese sería en buena compañía y haciendo lo que nos gustaba.
En el camino hemos bajado y subido, acertado y fallado, reído y llorado, caído y levantado… en definitiva, hemos vivido. Y nos hemos orientado con una brújula que tenía unas agujas muy especiales, las nuestras de tejer.
Este cuento no termina, porque nuestra historia no ha hecho más que empezar…
Reblogueó esto en MissQ40y comentado:
Más bonito no ha podido ser…gracias compi por meternos de lleno en estos proyectos tan bonitos. Solo se que muero de emoción.
Gracias a todos