"La felicidad no es un destino al que perseguir, es la actitud con la que decidimos vivir la vida"
El 2017 no ha sido precisamente un año para tirar cohetes, así que lo despido con alegría, al fin y al cabo la vida es eso, momentos buenos y otros no tanto, como un ovillo en el que, de vez en cuando, se hacen nudos ¿a qué os ha pasado más de una vez?, los buenos momentos hay que disfrutarlos y los nudos hay que intentar deshacerlos y, si no se puede, cortarlos y dejarlos marchar.
Lo que sí he aprendido es que, después de la noche siempre llega un nuevo amanecer, y después de la tormenta siempre hay un arcoriris esperando. Cada año lleva consigo una nueva ilusión y la posibilidad de ser mejor y crecer como persona, y esto solo depende de uno mismo, de nadie más. ¡Así que recibo al 2018 con ilusión!
Entre los muchos mensajes que se mandan estos días me ha llegado éste de la psicóloga Mirta Medici y me ha parecido la mejor forma de felicitar el nuevo año que está por venir:
«No te deseo un año maravilloso donde todo sea bueno. Este es un pensamiento mágico, infantil, utópico. Te deseo que te animes a mirarte, y que te ames como eres. Que tengas el suficiente amor propio para pelear muchas batallas, y la humildad para saber que hay batallas imposibles de ganar por las que no vale la pena luchar. Te deseo que puedas aceptar que hay realidades que son inmodificables, y que hay otras, que si corres del lugar de la queja, podrás cambiar. Que no te permitas los no puedo y que reconozcas los no quiero. Te deseo que escuches tu verdad, no la del otro. Que te expongas a lo que temes, porque es la única manera de vencer el miedo. Que aprendas a tolerar las manchas negras del otro, porque también tienes las tuyas, y eso anula la posibilidad de reclamo. Que no te condenes por equivocarte, no eres todopoderoso. Que crezcas hasta donde y cuando quieras. No te deseo que el 2018 te traiga felicidad. Te deseo que logres ser feliz, sea cual sea la realidad que te toque vivir»
Aún así os confieso que yo sigo creyendo en la magia… la magia de la Navidad, la magia de las personas buenas, la magia que todos tenemos dentro, la magia de las pequeñas cosas de la vida, la magia de un ovillo, y la magia de nuestra imaginación…
Cada año que comienza es un nuevo principio, una oportunidad para borrar lo que no nos gusta y plantearnos nuevos propósitos, como un ovillo nuevo a punto de empezar y con un montón de posibilidades, solo hay que echarle un pelín de imaginación.
Estos son mis propósitos para el 2018:
- Quejarme menos, dejar de pensar en lo que perdí y valorar lo que tengo, el aquí y el ahora
- Disfrutar de la imperfección, nadie es perfecto, ni tampoco queremos serlo
- Apagar más el móvil, la vida real es muchísimo mejor
- Ayudar a los demás, porque siempre es mejor dar que recibir
- Poner música más a menudo y bailar en la cocina, porque la música amansa a las fieras
- En definitiva, vivir el presente, porque el pasado ya se fue y, por eso, no importa, y el futuro no lo conocemos así que ¿para qué preocuparnos por el?
Bueno, ademas de esos propósitos también me gustaría escribiros un post todas las semanas, lanzar la shop (con patrones a medida), haceros videos totorales para mi canal de Youtube y quizás… escribir un libro…
¿Cuáles son los vuestros propósitos para el 2018?
¡Os mando un beso gigante, y os deseo un 2018 lleno de ilusión, de ovillos, de nuevos proyectos y de cosas buenas!
Me encanta todo lo que haces.
Podéis mandar tutoriales? Gracias
¡¡Mil gracias!! Me alegro de que te guste. Ya hay algunos totorales en el blog e iré subiendo más.
Besos,
Sandra
Si señor, el pasado ya se fue, y el futuro aun no llegó, asi que a disfrutar a tope del presente que es lo que tenemos!!! Por cierto grandes propósitos… y desde luego que puedes … A por ellos sin miedo!! Un besote enorme y a comerse el 2018