10 habilidades necesarias para mi día a día

Si tú estás bien, todo lo demás estará bien, esta es una de mis frases favoritas desde hace algunos años.

Mi día a día suele ser bastante intenso entre mis dos trabajos, los niños y la casa, lo que hizo que, durante una época tuviera poco tiempo para dedicarme a mi misma, y estuviera en una situación de continuo estrés y cansancio, con poco tiempo para cuidarme a mi misma.

Esto último fue lo que más me costó, sacar tiempo para dedicarme a mí, para sentirme mejor porque, además, por mi trabajo suelo viajar bastante. Una de las cosas que os confieso que más me costaba era cuidar y arreglar mi pelo, que es una de las cosas que creo que nos hace vernos y sentirnos mejor a las mujeres. Yo hago deporte casi todos los días y, por eso, me suelo lavar el pelo a diario. Además, tengo el pelo encrespado, con lo que perdía mucho tiempo secándomelo y arreglándomelo hasta que encontré la solución perfecta con el cepillo de peluquería y las planchas de pelo que, literalmente, me salvaron la vida ahorrándome mucho tiempo para tener el cabello cuidado.

Por eso, os recomiendo que empecéis cuidándoos a vosotras mismas, con pequeños rituales de belleza, haciendo deporte, con una alimentación sana y equilibrada y también con tiempo para salir con las amigas y reírte un rato.

Poco a poco fui dándome cuenta de que eso, no solo me perjudicaba a mi, sino que también lo hacía a las personas de mi alrededor y así fui tomando conciencia de una serie de cosas que se han acabado convirtiendo en premisas básicas de mi día a día.

  • Hay que salir del papel de víctima y aprender a mirarnos desde fuera, saliendo al «balcón» y observándonos a nosotras mismas
  • Escuchar los consejos de la gente amiga, y dejarnos ayudar
  • Que detrás de la adversidad siempre hay un gran crecimiento personal y, además, aprendes a valorar las cosas mucho más; es decir, el fracaso y la adversidad no son tan malos como pensamos o como nos han enseñado
  • Las cosas hay que verlas como retos y no como problemas. Por eso, ante situaciones adversas asumo mi responsabilidad personal y, además, lo hago con optimismo
  • Muchas veces somos adictos a la inercia, es decir, sabemos lo que tenemos que hacer pero no hacemos nada
  • En momentos de adversidad es importante tener la mente ocupada, provocarnos retos añadidos y coherentes con el camino al cual queremos llegar, y celebrar los pequeños logros que vayamos consiguiendo
  • Y, por último, debemos cuidarnos y estar bien con nosotras mismas.

Con el tiempo he llegado a la conclusión de que estos son los diez recursos o habilidades necesarios que creo que todas deberíamos tener, y os cuento también como los he aplicado yo en mi día a día:

  1. Tener un propósito personal y profesional: obviamente mi gran propósito personal son mis 3 hijos, que quiero que crezcan como personas fuertes, responsables y resilientes, y mi propósito profesional mi trabajo como abogada y mi blog Poleomenta
  2. Aceptar la realidad y asumir mi responsabilidad: lo que me pasa depende mi, sobretodo de la actitud que yo adopte ante las cosas que me pasan en la vida, ya sean buenas o malas
  3. Optimismo realista: aquí yo tiendo a irme un poco a las nubes… ¡pero todo se andará!
  4. Energía física (es fundamental estar bien físicamente): para mi el deporte es fundamental, no solo desde el punto de vista físico sino también desde el punto de vista emocional, porque es una de las formas en las que libero el estrés acumulado en mi día a día
  5. Tener un plan por escrito con efectividad tanto a nivel personal como profesional: esto me costó mucho, os lo tengo que confesar, pero ahora intento planificar mis objetivos de forma trimestral y cada domingo me siento un rato con un té, a analizar los logros de la semana pasada y planificar la siguiente, ¡y nos sabéis lo que me ayuda a dormir tranquila!
  6. Acción, acción, acción: esto es muy simple, aunque sea empezar desde poco y un pequeño paso tras otro, porque esos pequeños pasos son los que te van a llevar muy lejos, es lo que yo llamo la teoría de a poquitos, es decir, hacer un poco cada día.
  7. Stop and Think: párate y piensa porque, ¿cuántas veces hemos estado en la rueda del hámster dando vueltas sin parar y, lo peor de todo, sin darnos cuenta?
  8. Tener retos continuos, porque la mente es peligrosa y hay que tenerla ocupada: a mi esto me encanta porque siempre me ha gustado aprender cosas nuevas (leer un libro, hacer un curso de algo que te guste, ir a una conferencia…)
  9. Un entorno que ayude: rodearme de personas positivas, pasar tiempo de calidad con mis hijos, da paseos por la playa.
  10. Celebrar los pequeños logros que vayamos teniendo en el camino y, sobre todo, cuidarnos porque es fundamental sentirse bien con una misma.

Una de las mejores terapias para mi fue empezar a tejer, eso me enseñó a tener más paciencia y a empezar a disfrutar de los pequeños momentos del día a día. Os lo cuento en este post.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

¡No te pierdas nada! Suscríbete a la newsletter

Para que te enteres de todo antes que nadie, para que no te pierdas cosas que te gustaría encontrar, para llevarte sorpresas, ideas y sonrisas… para ti